Por Rodrigo Lanuza
¿Es posible que una empresa que comercializa vestuario para un nivel socio económico medio sin una planta de producción propia, pueda poseer una Marca más valiosa que una empresa de aerolíneas internacionales como American Airlines o que una armadora de autos como Ford?
Efectivamente, así es. La respuesta está ligada a las estrategias de Branding, Marketing y Gerencia de Propiedad Intelectual que las empresas al día de hoy utilizan, ya no sólo a la tradicional política de reducción de costos, ahorros y producción en serie.
Cuando uno piensa que existe una lista de las Marcas más valiosas en el mundo, de inmediato se imagina que es un sitio reservado al que nuestros industriales y compañías nacionales no tienen acceso. Si adicionalmente partimos de que el lugar número 98 está ocupado por NISSAN con un valor de $3,072 millones de dólares y que el lugar 97 lo tiene la empresa LG de electrodomésticos con un valor sobre su Marca de $3,100 millones de dólares; obviamente pensaríamos que se requiere de grandes inversiones tecnológicas para poder escribir el nombre de una Marca mexicana en esta lista de oro.
Contagiado por la idea de Winston Churchill de que podemos contribuir en la construcción de nuestro propio universo y lograr en el camino lo que nos propongamos, o entendiéndolo bajo el ya muy mexicano dicho ¡Sí se puede!, es que he elegido Marcas que pertenecen a este exclusivo grupo de las 100 más valiosas dentro de rubros en los que podemos competirles inmediatamente y empezar a visualizar cómo podemos conquistar ese éxito.
De inmediato me aborda un sentimiento de ansiedad por no encontrar ningún representante mexicano, ya ni siquiera latino; el más inspirador es el caso de la marca española ZARA. Pero me queda claro que el mensaje es el de que sí existe oportunidad para incursionar en esta lista de Marcas que han trascendido, pues en nuestro Estado podemos ver cómo compiten con mucho éxito Marcas nacionales como POLLO FELIZ frente a un KFC, donde la nacional cuenta con un mayor número de sucursales o franquicias que la norteamericana. O cómo una Cerveza CORONA en muchos países tiene mayor preferencia que la americana BUDWEISER y cómo incluso existe una fuerte rivalidad gracias a los negocios independientes y familiares que inician con firmes estándares de calidad sin dejarle el camino libre a los STARBUCKS.
Este artículo está dedicado a los empresarios nacionales, invitándolos a que inviertan en estrategias profesionales que les lleven a identificar nuevas formas de generar riqueza y valor en sus activos intelectuales, y también aprovecho para felicitar a quienes han encontrado en sus Marcas, patentes, derechos de autor y franquicias, una forma de éxito y trascendencia.
